Un interrogante llamado futuro

por (el mostro) Marble Arch

Un empate lógico entre la juventud general de Estudiantes y el orden eficiente de Belgrano, tan efectivo que en la única jugada hilvanada del primer tiempo la mandó a guardar, ayudado por el estatismo de la zaga local. Antes del descanso, con empuje, la experiencia del Chino y con algunas cositas del pibe Correa –un diamante en bruto-, el León fue inclinando la cancha hacia el arquero del 7 a 0, pero no acertó la puntada decisiva, para irse al vestuario en inmerecida desventaja.

Los 20' iniciales del complemento, al margen del tempranero empate de Guido Carrillo que significó además una suerte de compensación a su absurdo destierro, mostraron lo mejor del Pincha, llegando por las bandas con Modón –de su centro perfecto sobrevino el cabezazo de la igualdad- y de Jonathan Silva.

Sin embargo, con el correr de los minutos el local fue perdiendo verticalidad, y empezó a correr más que la pelota para tratar de recuperarla luego de las reiteradas cesiones erróneas de Schunke y Braña cuando no se lograba salir tocando porque Jara no pesaba y Correa era muy intermitente. El "Chapu", no obstante, se cansó de morder.

Arriba, uno de los peores partidos de Duván, al margen de un frentazo ancho y de esa que cuerpeó para generar un tiro de esquina; previamente, y después, lo anticiparon casi siempre. Y Guido, despierto con el fútbol en los pies, generoso para cederlo y abnegado para buscar espacios libres, volvió a demostrar su utilidad. Fue colgado en un momento en el que todo el equipo se caía a pedazos, la ofició de pato de la boda, y se trata de un jugador para no desperdiciar.

En el final, el Pirata se animó y el pibe Rulli le tapó una cruzada a Velázquez que iba adentro. Los ingresos de Maxi Núñez y la Gata no aportaron nada, con sólo 10' de cierre para Gastón, y el once de Pellegrino, ya vacío de ideas, pareció en ese tramo acusar el desgaste para empardar la parada.

Un gran interrogante se abre de cara al segundo semestre. "Me dijeron que me tenía que quedar", afirmó Desábato. Se descuenta la rentrée de la Brujita, alrededor de Braña hay mil versiones, la Gata cayó un pozo profundo, el tiempo pasa para todos, y si por una bendita vez se compra bien, cabe rogarles a los dirigentes por la contratación de un distinto, de alguien capaz de frotar la lámpara y desequilibrar.

Salutti

P U N T A J E S

Rulli: 6 

Modón: 5

Schunke: 3

Ré: 5

Jonathan Silva: 6

Benítez: 6

Braña: 5

Jara: 4

Correa: 6

Duván: 5

Carrillo: 7

Maxi Núñez: 4
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Estudiantes 2 / Lanus 0 / 45 minutos finales

Clic en la imagen o aquí para ver el resumen de los segundo 45 minutos contra Lanus.

Gracias Farmachista!

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Un paso atrás que lo dejó sin nada

El Pincha jugó un partido muy pobre en San Juan frente a San Martín, y por culpa de dos errores propios se vuelve sin nada de una visita que por como se dio el trámite del partido tranquilamente pudo haber terminado de otra manera.

Estudiantes dio un paso atrás en su visita a San Juan, y cayó frente a San Martín en un partido chato en el que ninguno de los dos equipos contó con un buen nivel, y los errores en la defensa pincharrata fueron los que decidieron el desenlace del encuentro.

El trámite del partido fue sumamente extraño, ya que el Pincha salió decidido en el arranque, y pareció llevarse por delante a un equipo local que lució nervioso en los primeros minutos, y no pudo conectar dos pases seguidos.

Sin embargo, una vieja máxima del fútbol señala que los goles que no se hacen en un arco se convierten en el otro, y así fue casi a los 20 de la primera mitad, cuando segundos después de que Román Martínez se perdiera un gol increíble el local encontró la ventaja por un error de Rulli en su primera incursión seria en ataque.

A partir de ahí el partido fue otro, aunque lejos estuvo de ser dominado por San Martín, que si bien se tranquilizó no hizo más que cederle la pelota a su rival y replegarse a la espera de un contragolpe que, en esos primeros 45 minutos, nunca llegó.

El cambio no pasó por el conjunto local, más allá de la mayor tranquilidad que adquirió, sino que se vio en el juego de Estudiantes, que pasó de manejar la pelota con criterio en los primeros minutos a perder la brújula luego del gol.

Así el partido se volvió trabado y sin grandes ocasiones de gol, con las imprecisiones como moneda corriente, y con los arqueros como espectadores de lujo en una primera mitad que acabó con muy pocas ocasiones de gol.

El Pincha no jugaba bien, pero San Martín tampoco había hecho méritos para estar arriba. Sin embargo, al comenzar la segunda mitad el ingreso de Gastón Fernández en lugar de Gil Romero generó expectativas, siendo una variante ambiciosa e incluso arriesgada.

Pero no hubo caso. El partido siguió siendo igual de mal jugado y la Gata pasó completamente desapercibido en el juego, mientras que la falta de Gil Romero dejó al Pincha con menos recuperación en el medio del terreno de juego.

Así fueron pasando los minutos, con Estudiantes intentando arrimarse al área local pero sin conseguirlo más que no fuera por intentos de pelota detenida, y con San Martín aguantando atrás y mirando a cada momento el reloj.

El León tuvo la pelota durante todo el complemento, pero no se le cayó una idea, y en la primera de cambio el Verdinegro aprovechó una nueva falla en defensa para sacar dos goles de diferencia y sentenciar el partido.

Estudiantes dio un paso atrás. Si bien quizás no mereció perder, y el resultado no se condijo con el desarrollo del partido, su nivel fue bastante pobre, y deberá mejorar de cara al compromiso que tendrá entre semana frente a Lanús si quiere quedarse con esos tres puntos que por ahora le pertenecen. En San Juan, por lo pronto, los Estudiantes se fueron reprobados.

Fuente: Cielosports

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Otra muerte para Grondona y el APREVIDE

por Marble Arch

¿Puede hablarse de un partido disputado con un cadáver a cielo abierto detrás de una tribuna del Estadio de la Corrupción Única? ¿Cómo abstraerse de la locura generada en el ingreso de la parcialidad granate, en su batalla cuerpo a cuerpo con las teóricas "fuerzas del orden", en los cohetazos que atronaban el aire? ¿Es necesario, ahora, revivir el calvario en que se convierte cada cacheo para la gente común, para el hincha fiel, para el socio, cuando vamos a jugar lejos de casa?

Un Lanús superior de salida, movedizo, concentrado, quizás sabiendo que enfrente tenía la última posibilidad para seguir con vida en su sueño de campeonear. Pero no le alcanzó, porque su dominio del mediocampo durante los 25' iniciales no encontró eco en el área local, y la más clara estuvo generada por un yerro infantil de Rulli, en un saque corto al pie del rival para una desventaja 1-2 en la boca del área grande, y el disparo rasante del Pochi Chávez que se fue apenas ancho ante la "vista" del pibe culposo.

Hasta que empezó a agarrarla el chico Correa, con su sello distintivo de jugador distinto, y el León lo emparejó. A los 35" vino el tiro libre del Chino, con mucha rosca al punto del penal, para el zurdazo bajo del Chavo en perfecto anticipo ofensivo para decretar el 1 a 0.

Estudiantes tomó confianza con el envión, y al ratito el segundo, nacido de un lujo efectivo de Correa abriéndola de taco para la corrida de Jonathan Silva, el centro de éste a media altura, y la zambullida de Duván para meterla de palomita al doblegar la débil resistencia del arquerito Andrada.

Era 2 a 0, justificado por los últimos 15, y se irían al descanso para no regresar. Enorme incertidumbre en la cancha por la demora en el reinicio de las acciones, llamados insistentes de amigos y familiares preocupados, y versiones de todo tipo envueltas por una atmósfera tensa, de tragedia.

Loustau se enteró del deceso del hincha visitante en el vestuario, se habla de un muchacho de 40 años; y los equipos no volverían al campo de juego luego de una reunión de los presidentes de los dos clubes con las autoridades del encuentro.

Antes de conocerse la suspensión, en el boca a boca el miedo comenzó a contagiarse, a correr cual reguero de pólvora; ésa desperdigada en los alrededores del estadio para agregar un nuevo muerto a la inagotable Lista Negra cuyos responsables tienen nombre y apellido: Julio Grondona, el APREVIDE (hijo pródigo del patético COPROSEDE), y toda la lacra de funcionarios ineficientes devenidos en nuevos ricos, con sueldos "blues" y gestiones lapidarias comprobadas en esta vergonzosa realidad cotidiana. 

Salutti 

Puntajes 

Rulli: 5 
Schunke: 5 
Desábato: 7 
Angeleri: 6 
Jonathan Silva: 6 
Román Martínez: 5 
Benítez: 6 
Gil Romero: 5
Jara: 6
Correa: 7
Duván: 7
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Un empate que lo dice todo

por Marble Arch

La solidaridad del piberío de la Paternal se robó un punto vital en su visita a La Plata, ante un Estudiantes que quiso, no pudo, y casi se queda con la mochila vacía. Lo salvó su arquerito, el golero del futuro para el arco del León, con una atajada magistral en ese mano a mano con Anangonó luego de la enésima falla de Desábato, allá por los 40' del complemento.

Mejor el Pincha, manejando la pelota durante la primera mitad, pero sin profundidad, porque la movilidad de Román Martínez y el pivoteo de Duván no encontraron eco en un ausente Maxi Núñez; ni la necesaria sorpresa en la anunciadas escaladas de Jonathan Silva y Angeleri por los laterales, rematadas por lo general con centros pasados o sin destino.

Enfrente, un rival muy apremiado por el promedio, sacudido por el despido de tres de sus históricos en el curso de la semana y por el papelón mediático de Caruso con Placente. Aunque el polémico técnico, confeso hincha albirrojo, de tonto tiene poco y llegó al Único con once guerreros dispuestos a morder cada centímetro. Y si hubiese metido como esta tarde desde el vamos del torneo, hoy el descenso ni rozaría al Bichito.

En la segunda mitad, Argentinos se empezó a animar a medida que el Tetra acentuó sus falencias. Y se hizo más de ida y vuelta por los ingresos de la Gata y el prometedor Joaquín Correa por los intrascendentes Auzqui y Benítez; en una triangulación, el pibe bajó una pelota divina, cortándola de aire, que Duván no logró conectar con justeza.

No obstante, Román y Braña erraban tupido en las cesiones, el ex Tigre la iba a buscarla hasta el área de Rulli, Núñez se enredaba solo, y los avances locales se diluían ante el obediente escalonamiento del huésped; que sólo sufriría, al cierre, un cabezazo al piso de Martínez después de un tiro libre con bastante rosca de la Gata.

En la última jugada, una patadita tonta de Gastón le valió doble amarilla y una roja expresiva de este momento tan lejano a su glorioso cuarto de hora.

Una igualdad opaca. Que sin cortar el envión positivo, desacelera la ola de entusiasmo y abre una serie de interrogantes para el futuro inmediato y para el campeonato venidero, máxime si venden a Zapata.

Un empate que lo dice todo: a Estudiantes le faltan toneladas de juego.

Salutti

Los puntajes

Rulli: 8
Ré: 5
Desábato: 5
Angeleri: 4
Jonathan Silva: 4
Benítez: 4
Román Martínez: 6
Braña: 4
Duván: 5
Maxi Núñez: 3
Auzqui: 3

Correa: 6
Gata: 4