Se hace dif铆cil digerir este traspi茅. Reci茅n llegado de Quilmes, pienso en toda la previa, en los noventa de ida, en los nervios de esta noche, y caigo en la cuenta que volvimos a quedar afuera sin perder en el examen decisivo. Como en la 煤ltima eliminaci贸n de la Libertadores. En un partido calcado, si se quiere, al igualado con Central mientras Independiente se le desnudaba a Argentinos Juniors y a la AFA : el Pincha lo busc贸 por todos lados, y se fue con las manos vac铆as.
Se hizo dif铆cil ante un equipo amarrete, taca帽o, que vino como punto raso y se fue disfrazado de banca: el “no more” era universal en horas del crep煤sculo, cuando muchas casas de apuestas deportivas internacionales dejaron de tomar jugadas al Le贸n, que devolv铆a 1.57 por cada peso apostado, en un favoritismo inusual para una final internacional.
En ese planteo, el de uno que no quer铆a y el otro que iba e iba, el Grande lo busc贸 por todos los medios: por derecha, por izquierda, triangulando, con pelotas a espaldas de los laterales, con centros, con tiros de afuera. Fue al frente los 90 minutos, se adue帽贸 de la pelota en un porcentaje clar铆simo, lateraliz贸 con criterio y procur贸 abrir el cerrojo ultradefensivo planteado por Bauza. No “lig贸”.
Alguien le reproc
har谩 a Sabella su negativa a Taborda, quien cuando el match se mor铆a quiso subir a cabecear un corner. O una demora en la variante de Pe帽alba por R茅, reclamada de antemano m谩s all谩 de los nombres y en el recuerdo inconciente de la etapa de Simeone. Ser铆a injusto para un t茅cnico laburador, reflexivo, que transfiri贸 esa idea para que sus once la plasmaran con paciencia infinita. Si s贸lo en los 7 煤 8 minutos decisivos se revole贸 la pelota al ollazo, buscando un cabezazo salvador que habilitara a un compa帽ero de cara al gol.

En el balance desprovisto de fanatismos, el Pincha lo mereci贸 con creces, porque adem谩s, fue inmensamente superior a la Liga en los 180 globales, tambi茅n de visitante con aquella injusta derrota.
Hay que destacar el esfuerzo de todos, el partidazo de Fede Fern谩ndez y de Enzo P茅rez, y reconocer la estatura de este cuadro que disputa FINALES INTERNACIONALES en representaci贸n de un pa铆s. El cerrado aplauso de despedida, no exento de emotivas l谩grimas, fue la mejor retribuci贸n de la gente.
Afuera se jug贸 otro partido, y la consagraci贸n internacional del COPROSEDE, amplio acreedor a la estrella de oro en el CUADRO DEL DESHONOR. Los cacheos, los embudos, las demoras y el maltrato policial con la gente NO DEBE CAER EN SACO ROTO. M谩xime en una cancha abarrotada de espectadores inc贸modos –hablo de mayor铆a de ni帽os, mujeres y familias-, mientras DOS PULMONES RID脥CULOS eran mudos testigos de una medida arbitraria, absurda, discriminatoria y malintencionada. Hab铆a m谩s efectivos que en un Boca-River. Entiendo que en varios pasajes la gente no alent贸: entr贸 nerviosa a la cancha, hastiada de soportar tanta injusticia que siempre viene del mismo lado. Pues el nefasto y lapidario organismo comandado por el denominado “Rat贸n” P茅rez puso su granito de arena para EVITAR UN CLIMA DE FIESTA, como si persiguiera el 脡XITO EXTRANJERO. A estas horas, sus mentores deben estar celebrando la victoria m谩s triste y retorcida, que es la victoria de la negaci贸n.
Se acaba de escaparnos la Recopa , como tambi茅n se esfum贸 la Sudamericana ante el Inter de Porto Alegre, y la Final Mundial de Clubes frente al mejor Barcelona de la historia. Siempre MURIENDO DE PIE, fiel al estilo emanado del Country, a la m铆stica y a la escuela que tanto molesta a mediocres y obsecuentes PORQUE ES UN MODO DE VIDA basado en la humildad, en el talento y en el esfuerzo. Y concede PRESTIGIO, algo que no se consigue con dinero.
Pablo F. Gallo