Análisis por Marble Arch
Canchita por Maraja
El Pincha se trajo otra estrella de su choque de cometas gracias al ensueño de una actuación portentosa del equipo en el caluroso atardecer santiagueño, borrando de la cancha a un Vélez instalado a modo de imperdible durante la semana por los medios hegemónicos deformadores de opinión.
Faltó el DT Quinteros por el casamiento de su hija en Suecia –Bilardo hubiese secuestrado al cura o al novio…-, el once de Liniers fue dirigido por el “Chavo” Desábato, y evidentemente muchos hinchas estuvieron invitados a la fiesta de enlace, porque la localía albirroja, reventando la cabecera sur, resultó elocuente frente al pobre aliento al flamante campeón. Y la fe de su gente vivió la apoteosis de la comunión con la actitud, el hambre, la postura y el compromiso de los jugadores, que salieron a arrollar a su rival, lo mordieron, lo rasparon, lo incomodaron en todo el partido, y lo terminaron pasando por arriba con un 3 a 0 categórico.
Hubo una tapada bárbara de Mansilla al atorar temprano a Brian Romero, y un bombazo del platinado Maher Carrizo devuelto por el horizontal cuando nuestro golero hacía vista, aunque ya previo al frentazo letal de Boselli en un córner magistral ejecutado por Tobio Burgos –travesaño, espalda de Marchiori y adentro-, el León merodeaba la apertura con un derechazo de Manyoma, un zurdazo alto de Meza, otro de Palacios quemando las manos del arquero, y esa de sobre pique tomada por Carillo a la carrera tras un envío combado de Tobio.
El acertado planteo de Domínguez contó con dos fieras en la cueva, seguridad en los laterales con Benedetti en lugar de Arzamendia, Enzo Pérez en modo Enzo Pérez, el Rusito comiéndose el terreno, Tiago Palacios en su mejor partido por lejos desde que llegó al club, Tobio Burgos con tremenda personalidad, Guido en llamas para pelearlas todas, y un incisivo Manyoma para anotarse incluso el 2 a 0, arqueando su cuerpo al cortar con su pierna derecha un balón bajado por Lollo en un tiro libre de Palacios para meterlo entre el primer palo y Marchiori.
En el complemento, el Fortín intentó acortar distancias, pero se topó con un oponente muy convencido de su misión, que redobló esfuerzos y jamás le permitió reaccionar. Encima, el 3 a 0 significó un auténtico golpe de nocaut: Palacios pelea una pelota en el extremo derecho, resbala Valentín Gómez, Tiago cede atrás a Meza, el ex Colón levanta la vista, centro perfecto al corazón del área y Carrillo, con un salto sublime desde lo artístico para anticipar en el aire a su marca, la clava cruzada e inatajable contra el caño izquierdo. La sensación de cosa juzgada era abrumadora.
Ya estaban Piatti y Neves por Tobio Burgos y Manyoma. Ya la tribuna y el banco eran un jolgorio, y los ingresos de Sosa y Luciano Giménez, a falta de 8 minutos, permitieron sendas ovaciones a los reemplazados Carrillo y Tiago Palacios.
La vuelta olímpica se disfrazó de The Last Dance para Piatti y Fede Fernández, que se retiran del deporte, para Luciano Lollo –seguiría en Belgrano de Córdoba- y también para Enzo Nicolás Pérez, quien en el vestuario les comunicó a sus compañeros la decisión de no continuar en el Club; la altura de su función de despedida y la emoción exteriorizada por el mendocino en los festejos permiten inferir que no ha sido un laudo sencillo en su interior.
Suenan las bocinas en la silenciosa ciudad de La Plata a las 9 de la mañana de este domingo 22 de diciembre. Son los primeros pincharratas arribados de Santiago del Estero, en el regreso de otro viaje insensato programado por los cráneos de la AFA. “El que crea que venga”, sentenció una vez el “Cholo” Simeone. Y vaya si creyó la gloriosa hinchada de Estudiantes, insuflada por ese espíritu avasallante para copar el Madre de Ciudades, contagiar acaso al plantel y besar la decimocuarta copa de un verdadero grande del fútbol mundial.
Salutti
Mansilla: 6
Meza: 8
Boselli: 8 ⚽
Lollo: 7
Benedetti: 6
Manyoma: 8 ⚽
Enzo Pérez: 8
Ascacíbar: 8
Palacios: 9
Tobio Burgos: 7
Carrillo: 8 ⚽
Piatti: 5
Neves: 6