1/ Bilardo nunca desaprovech贸 oportunidad para ver c贸mo sacar ventaja t谩ctica frente a sus adversarios. Siendo DT de Selecci贸n, uno de sus jugadores festej贸 su casamiento, al que acudieron gran cantidad de jugadores de diferentes pa铆ses. En un momento, el Narig贸n mand贸 a llamar a Ricardo Gareca. “¿Ves ese tipo que est谩 bailando all谩?”, le dijo, en referencia a un defensor italiano. “And谩 y parate al lado”, agreg贸. “¿Para qu茅?”, pregunt贸 el delantero. “Porque quiero ver quien es m谩s alto para los centros”, remat贸 el DT.
2/ La obsesi贸n es un claro aspecto bilardista, y el aprovechamiento de todos los estados, incluso el del sue帽o, tambi茅n. En la preparaci贸n para la final del Mundial ’86 contra los alemanes, Bilardo le asign贸 la marca de Rummenigge a Ruggeri. No le alcanz贸 con los entrenamientos para que al Cabez贸n le quede claro: durante una semana entr贸, de madrugada, a la habitaci贸n del defensor para preguntarle mientras dorm铆a “Ruggeri, ¿a qui茅n marc谩s?”.
3/ A la hora de reclutar jugadores, Bilardo ten铆a algunas t茅cnicas llamativas. Eran tiempos de armar el grupo para el Mundial ’86 y Julio Olarticoechea, cuenta la historia, no quer铆a formar parte del plantel. Un d铆a, el Vasco iba en su auto por la autopista cuando, en un peaje, un auto le empez贸 a tocar bocina y a hacer luces desde atr谩s. Dispuesto al insulto, Olarticoechea se sorprendi贸 al comprobar que el conductor molesto no era ni m谩s ni menos que Bilardo, que le grit贸 “segu铆me”, lo llev贸 hasta una plaza y le dio una charla t茅cnica con una piedra y un dibujo en un pared贸n.
4/ Ser nuevo en un equipo no es f谩cil. As铆 lo entendi贸 siempre Bilardo, y perge帽贸 diferentes t茅cnicas para aclimatar jugadores. Cuando Sergio Goycochea ingresa a la Selecci贸n, el encargado de ayudarlo a adaptarse fue Ruggeri. “Que no te extra帽e que Carlos te llame a la noche y te cite en alg煤n lado”, le advirti贸 el Cabez贸n a la futura figura del equipo. D铆as m谩s tarde, el llamado efectivamente lleg贸, y Bilardo lo cit贸 a la medianoche en una plaza. Al llegar y ver que el DT estaba con cinco jugadores m谩s y una roda de autos que iluminaban un sector, Goyco pregunt贸: “Carlos ¿para qu茅 hacemos esto?”. “Para ver si sab茅s atajar de noche”, fue la respuesta.
5/ La obligaci贸n de ganar y el desm茅rito de volver con las manos vac铆as son dos ideas claras del estilo bilardiano. Antes del viaje a M茅xico, donde aterriz贸 un mes antes del campeonato, el Narig贸n le dijo a sus jugadores: “Muchachos, en la valija pongan dos cosas: un traje y una t煤nica. el traje es por si ganamos el Mundial, y la t煤nica es por si perdemos en primera ronda ¡y nos tenemos que ir a vivir a Arabia Saudita!” Algo semejante ocurri贸 en el ’90. Tras la derrota del equipo contra Camer煤n en el debut mundialista, Bilardo advirti贸 al equipo: “¡Si perdemos contra Rusia, le pagamos un paraca铆das al piloto y manejo yo el avi贸n hasta que nos estrellemos!”
6/ Los r茅cords son los r茅cords, y si es cuesti贸n de ser el 煤nico en algo, Bilardo no deja pasar la oportunidad. As铆 ocurri贸 el 28 de marzo del ’90, cuando el equipo argentino estaba casi por superar el tiempo la marca del mayor tiempo de un equipo sin anotar un tanto. El encargado de contar la an茅cdota fue Jorge Valdano, que record贸 a su por entonces DT decir, en la previa al partido contra Escocia en Glasgow: “No se le ocurra meter un gol antes de los seis minutos porque nos quedamos sin r茅cord. Nosotros tenemos que estar en todas las conversaciones, en las buenas y en las malas. Despu茅s de los seis minutos hagan lo que quieran”.
7/ Bilardo nunca quiso hablar del tema, siempre con una rotunda negativa ante cada consulta en vano. El secreto se mantuvo por ocho a帽os, hasta que el Pepe Basualdo lo confirm贸 y Diego Maradona, en un programa de TV, repas贸 la jugarreta. El caso del “Bid贸n de Branco” remite al encuentro entre Argentina y Brasil en Italia ’90. En un alto del encuentro, varios jugadores se acercaron al banco y Miguel Di Lorenzo, m谩s conocido como Galindez, ofreci贸 bidones con agua. A Claudio Ibrahim Vaz Leal, m谩s conocido como Branco, le dio un bid贸n especial. “Tom茅 y me sent铆 atontado”, dijo luego el jugador. Todos intuyen que el agua estaba contaminada con somn铆feros.
8/ Corr铆a el a帽o 2004, muchos a帽os despu茅s del campeonato y el subcampeonato mundial, y Bilardo, DT de su querido Estudiantes de La Plata, volvi贸 a hacer de las suyas. El Doctor fue de visitante al Monumental, sali贸 a la cancha, despleg贸 una reposera y sac贸 a relucir un balde con una botella de champ谩n y una copa. Con el trago en la mano, en el entretiempo apareci贸 la polic铆a y un fiscal para labrar un acta, ya que est谩 prohibida la ingesta de alcohol en espect谩culos deportivos. Luego de hacer lacrar la botella, el Doctor dispar贸 una de sus frases m谩s recordadas: “Tengo 50 a帽os de cancha, no tiene bebida alcoh贸lica, tiene gatorei (sic)”.
MAESTRO!