Cocodrilo que se duerme es cartera

Análisis por Marble Arch

Canchita por Maraja

Tras observar el paupérrimo papel de Independiente ante Argentinos Juniors, para Estudiantes el Rojo parecía pan comido. Pero la suma de muchos detalles lo dejó con la bolsa vacía, y la necesidad de replantear varias cuestiones salta a la vista entre tanto runrún de transferencias.

El local se reivindicó, es cierto, con una producción bastante engordada. Pero el León, que por lo realizado debía reiterarse ganancioso en la primera mitad, pecó de ingenuo en el arranque del complemento, cometiendo errores letales.

Todo dentro de un marco de desempeños irregulares, porque el buen nivel de los marcadores de punta, del uruguayo Castro –tuvo la más clara luego de la mejor jugada colectiva de la noche tejida por Pellegrini- y del batallador Rogel, contrasta con la palidez general del mismo Pellegrini, la levedad de Zuqui –tiró a las nubes la otra chance patente de los 45’ iniciales-, las torpezas de un Noguera que así no puede exigir condiciones contractuales, y los orificios de un Corcho devenido en preocupante flotador de sus propios subibajas.

El Ruso eligió a Orosco para acompañar a Boselli. El pibe pese a algunas pinceladas no encontró su lugar en la cancha, y su reemplazo por Marinelli pone en evidencia alguna clase de cortocircuito entre el DT y Zapiola, quien anoche parecía titular cantado y ni siquiera entró.

En la apertura le ganan la espalda a Pellegrini, llega el centro, Benegas anticipa a Rogel y nuestro arquero con lapsus de metegol ni atina a sacar las manos. Al ratito, imprudencia de Noguera al ras del piso, penal, Andújar la manotea contra el poste sin lograr desviar el tiro de Fernández, y 2 abajo.

Con Spetale por Pellegrini, y con momentos de completo desequilibrio entre la cueva y la zona central de contención, los Diablos merodearon la tricota en un par de oportunidades. Y con más amor propio que ideas, apostando a su fuerza aérea y al empuje por las bandas, el equipo sin cerebro creativo –falencia que acaso ni el lesionado Piatti logre subsanar- trató de salvar la dignidad.

Hubo una clara de Castro, entrando por el segundo palo para cabecear ancha una linda pelota de Marinelli; el peladito, enchufado de movida, terminó mostrando su falta de confianza con pérdidas infantiles.

Y en una de las contadas intervenciones lúcidas de un Zuqui bastante flojito en los balones quietos, lo habilita por arriba a Boselli, Mauro de espaldas al arco se la cede a Más, el envío combado del sanjuanino busca a Godoy y el frentazo de éste culmina en un gol de lateral a lateral anulado erróneamente por el linesman, aunque convalidado al instante por el VAR.

Con el aliciente del descuento, el León fue por el empate, y en los minutos finales acorraló al dueño de casa. Con Rogel y Noguera parados de centrodelanteros, con una andanada de ollazos, con inocultable dejo de impotencia, con Lollo por Godoy para el descuento buscando otro parietal milagroso.

Y con innumerables dudas de cara al futuro flotando al cabo del encuentro, pues los baches del eje, la recurrente inseguridad de Andújar, la falta de juego asociado y cierta tozudez de Zielinski arman el combo perfecto para desenlaces como el vivido en Avellaneda. Donde además de resignar 3 puntos, el equipo ofreció la imagen de cuadro vulnerable frente a un adversario limitadito.

Salutti

Andújar: 4

Godoy: 7

Noguera: 3

Rogel: 6

Más: 7

Castro: 6

Corcho: 4

Zuqui: 5

Pellegrini: 4

Orosco: 4

Boselli: 5

Marinelli: 5

Spetale: 5