
NEWELL`S 0
Análisis por Marble Arch
Canchita por Maraja
El Pincha traía una envidiable ubicación en su zona, en el rol de perseguidor de Lanús. Sin embargo, tal lo expresado en Por Estudiantes, distaba de jugar bien, y esta noche en el Estadio Único acentuó su declive productivo, cosechando un magro empate para dejar al Granate con la ensaladera en el buche.
Voy a afirmar algo acaso temerario, pero basado en la observación del rival a lo largo del
certamen: NOB actuó incentivado. Externamente o por convicción. No fue el equipo timorato,
irresoluto, quebrado, cuestionado por su gente y estéril de visitante de todo el torneo. Al
contrario, peleó centímetro a centímetro, se plantó firme desde el vamos y mostró una cara
desconocida, prevaleciendo en la mayoría de las segundas pelotas, exhibiendo enjundia en el
choque físico y anticipando siempre con una concentración llamativa. Al resumen del match lo
completa la palidez pincharrata para el título justo de la crónica.
Ya de entrada nomás se vio a un León titubeante, esa sensación creció con el transcurso de los
minutos y cuando la agarraban el hábil Boyé –es crack-, el gato Formica o Maxi Rodríguez la hacían
circular con fluidez. A la Lepra le faltó profundidad, y en los 45’ iniciales, Estudiantes sólo arrimó
peligro por un buen pase de la Gata a Augusto Solari, desperdiciado por el ex River al adelantar el
balón en su ingreso libre al área.
Quienes esperábamos un complemento huracanado del albirrojo debimos contentarnos con la
ilusión de un arrebato místico. Porque a pesar de los acertados cambios a la altura de los 20’
–Cavallaro y Titi Rodríguez por el opaco Auzqui y Damonte-, reforzados al ratito por la entrada de
Umeres por Solari, el estatismo de sus hombres más creativos –poco de la Gata, nada de Viatri-,
las desacertadas resoluciones de Facundo Sánchez a sus escaladas por el lateral y ciertos horrores
defensivos liderados por un Chavo en bajísimo nivel, terminaron forjando un cero a cero
dolorosamente aceptable.
Pues si los rosarinos se llevaban los tres puntos, en el balance de la velada, nada había para
objetar. Y ese cabezazo de Desábato, al cierre, luego de un corner devenido de una gran apilada
del pibe Rodríguez, aportaba una victoria inmerecida.
El “Pulpito” Ascacíbar volvió a destacarse en la recuperación, y acaso hayan sido junto a Schunke
lo más regularcito de una producción para el olvido. La de un pincharrata que nunca generó una
imagen ganadora y apareció velado en cada toma, como si el obturador de su oponente hubiese
estado preparado para gatillar las fotos unos segundos antes.
Salutti
Puntajes
Andújar: 5
Facundo Sánchez: 4
Schunke: 6
Desábato: 2
Diarte: 5
Solari: 3
Ascacíbar: 6
Damonte: 4
La Gata: 5
Viatri: 2
Auzqui: 4
Cavallaro: 5
Tití Rodríguez: 6
Umeres: 5